
Informe 21
Hacías ejercicio y de pronto llegó una época en la que por trabajo, complicaciones y poco tiempo lo dejaste. ¡Grave error! Pero no te preocupes, siempre hay tiempo de retomar la actividad física. Existen muy buenas razones para hacerlo.
Beneficios de la Actividad Física
1) Reduce el riesgo de padecer enfermedades cardíacas
Cuando realizamos ejercicio, podemos ver cómo bíceps, tríceps y abdominales responden al entrenamiento, pero a veces olvidamos ese músculo vital que también se fortalece: el corazón. Sus cámaras se agrandan y bajan las pulsaciones, mejorando la presión arterial y ayudando a la circulación de la sangre. Aumenta la calidad de los glóbulos rojos, y las fibras que lo componen se vuelven gruesas y fuertes, lo que incrementa su masa muscular. Cuanto mayor es el músculo del corazón, más sangre bombea por latido, reduciendo su trabajo final, manteniéndolo sano y fuerte. Asimismo, existen otros factores directamente relacionados con la actividad física que intervienen en la disminución del riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular: el ejercicio puede ayudar a normalizar los niveles de colesterol, el control de la glucemia, reducir o prevenir la hipertensión arterial y la obesidad, entre otros beneficios.
2) Ayuda a combatir el estrés
Si hay un tema que te está preocupando, tuviste un día complicado o simplemente te cansaste de la rutina, no te subas al colectivo por esta semana y hacé el mismo trayecto en bicicleta. Vas a comprobar que los problemas no desaparecen, pero la mente se aclara y podés abordarlos desde otra perspectiva. ¿Por qué? Estudios médicos establecen que la actividad física regular afloja las tensiones y nos distrae del origen de nuestras preocupaciones, además de ayudarnos a re-energizar el cuerpo. Para combatir el estrés no hay una actividad que sea mejor que otra. Dependerá de la persona, sus gustos y el motivo de sus tensiones. Por eso, lo ideal es elegir ejercicios que brinden placer y ayuden a «cortar» con la rutina: si estás rodeado de gente todo el día, una caminata en la plaza cercana podría ser la mejor opción. Hay, incluso, disciplinas como el yoga y las artes marciales, que incluyen técnicas de relajación y meditación, ideales para quienes necesitan «desenchufarse».
3) Nos mantiene en forma
Todos los especialistas en obesidad afirman que no hay dieta que funcione si no es acompañada de actividad física. Pero no sólo para aquellos que tengan problemas serios de sobrepeso la actividad física es una aliada. Las personas que se encuentran en su peso logran llevar una vida saludable si acompañan una alimentación adecuada con la práctica deportiva. Esto ayuda al organismo a utilizar las calorías de manera más eficiente.
4) Puede ampliar nuestro círculo social
Practicar un deporte o actividad física es la mejor forma de ampliar tu círculo de amistades. La asistencia a clubes, grupos de actividades en las plazas o centros deportivos facilita la socialización, ya que es un espacio para conocer personas nuevas. Además, practicar nuestra rutina de ejercicios en compañía de otras personas nos ayuda a mantenernos en acción cuando estamos desganados. No dudes en buscar compañía cuando elijas salir a caminar, correr o andar en bicicleta: notarás la diferencia.
5) Refuerza nuestro sistema inmunológico
La actividad física cotidiana sirve de escudo ante el avance de virus y bacterias que pueden afectar nuestro organismo. En efecto, el ejercicio puede ayudar a eliminar bacterias y virus de los pulmones, disminuyendo las posibilidades de contraer un resfrío, gripe u otra enfermedad de transmisión aérea. Además, hace que nuestros anticuerpos y glóbulos blancos circulen más rápido, pudiendo detectar enfermedades de manera más temprana al estar más activas y «despiertas». En general, las personas que realizan actividad física frecuente y programada suelen enfermarse menos.
http://informe21.com/salud-y-bienestar/10-razones-para-retomar-el-ejercicio