
El Economista / EcoDiario
Una de las complicaciones más frustrantes y debilitantes de la diabetes es el desarrollo de heridas en el pie o la parte inferior de la pierna, las cuales, una vez que se forman, pueden persistir durante meses, dando lugar a infecciones dolorosas y peligrosas. Una nueva investigación revela el papel de una proteína particular en el mantenimiento de estas heridas y sugiere que revertir sus efectos podría ayudar a la curación de heridas en pacientes con diabetes.
«Descubrimos que una proteína específica, la trombospondina 2 (TSP2), está elevada en las heridas de los pacientes con diabetes y en los modelos animales de diabetes», señala la autora del estudio, Britta Kunkemoeller, estudiante de doctorado de la Universidad de Yale, Estados Unidos. «Para determinar si TSP2 contribuye a retrasar la cicatrización de heridas, genéticamente eliminamos TSP2 de un modelo de diabetes en ratones y observamos una mejor cicatrización de heridas. Nuestro estudio muestra que TSP2 podría ser un objetivo para una terapia específica para heridas diabéticas», afirma.