
El Economista / EcoDiario
Los adultos obesos con diabetes tipo 2 que se sometieron a cirugía de derivación gástrica continuaron mejorando después de cinco años para alcanzar el objetivo de control de azúcar en la sangre, colesterol y presión arterial, pero esa mejora pareció disminuir con el tiempo, según una investigación que se publica en ‘JAMA’.
La reducción de los riesgos vasculares y cardiovasculares relacionados con la diabetes tipo 2 requiere el control del azúcar en la sangre junto con el control de la presión arterial y el colesterol. La cirugía de derivación gástrica Roux-en-Y es efectiva para lograr estos objetivos de tratamiento de la diabetes, pero se desconoce si los efectos son duraderos.