
Cheryl Platzman Weinstock / Reuters / Yahoo
Tratar un trastorno del sueño común inmediatamente después de un ACV o un “mini” ACV mejoraría los síntomas neurológicos y la funcionalidad diaria de los pacientes, según sugiere un equipo.
En Estados Unidos, 25 millones o más de adultos padece apnea obstructiva del sueño (AOS), que provoca interrupciones de la respiración reiteradas, que duran segundos, durante la noche.
Eleva el riesgo de infarto, hipertensión, muerte súbita y ACV, además de acelerar el avance de la enfermedad cardiovascular. Las personas con AOS pueden usar máquinas de CPAP para mantener las vías respiratorias abiertas al dormir.